Situación de pobreza en las provincias que rodean a la capital es preocupante. Región también padece problemas ocasionados por la actividad minera.

Región Lima, marginada de la capital

Cuando Abraham Valdelomar dijo que el 'Perú era Lima', definitivamente no se refería a las provincias limeñas. Y es que basta con darse una simple vuelta a una de las nueve divisiones políticas que abarcan su geografía para comprobar que el centralismo es una realidad amarga que priva de todo a quien está fuera de la capital. Lo último que se ha dicho de la región Lima fue una breve mención dada por Alan García durante su mensaje al país por el 28 de Julio, donde destacó que se haya logrado el aporte minero de 9 millones de dólares para los estudios de asfaltado de la carretera Huaura – Oyón – Yanahuanca – Ambo. Además anunció que se va a iniciar el asfaltado de la vía Sayán-Churín y que se invertirá 4 millones para mejorar la carretera Pativilca – Cajatambo.Sin embargo evitó (o ignoró) mencionar el reciente problema que se generó en la zona de Casapalca, en la provincia de Huarochirí, que estuvo en constante conflicto con la empresa minera del mismo nombre. La zona de la Carretera Central colindante con dicha área fue bloqueada en reiteradas ocasiones.Similar caso ocurrió en la provincia de Oyón, donde la población se levantó contra la minera Buenaventura. El problema fue similar, la compañía se negaba a pagar los montos pactados con la municipalidad por el uso de terrenos de una comunidad campesina. Hasta ahora no hay solución. Igual, ni se mencionó.Problema constanteDefinitivamente la minería a nivel nacional puede producir progreso en las zonas donde opera, sin embargo algo que ya está confirmado y es fácil de comprobar es que la actividad minera de todas formas genera contaminación y ocasiona conflictos sociales. Los reportes que da la Defensoría del Pueblo mes a mes consignan que la mayoría de conflictos sociales, latentes o activos, son originados por problemas con las mineras. Situación que preocupa si se analiza el costo en vidas humanas que ha generado esta causa.Uno de los últimos problemas registrados en Cañete, al sur de Lima, fue con la minera San Valentín, así como con los trabajos del proyecto El Platanal, ambas obras fueron denunciadas por el alcalde local Ovidio Espinoza, pues asegura el burgomaestre que los trabajos que se vienen realizando están ocasionando serios daños al distrito de Lunahuaná. Y es que el perjuicio lo ocasionan los volquetes que frecuentemente transitan por la vía hacia los sitios de trabajo mencionados llevando cargas de hasta 60 toneladas, cuando la arteria usada fue estructurada sólo para llevar un tope de 32 toneladas por camión, exceso que daña el asfaltado, además de colapsar las vías de agua potable que pasan por debajo de la pista.El reclamo fue alcanzado al Ministerio de Transportes, sin embargo hasta la fecha no se ha dado ninguna respuesta. La población solicitó además que se instale una balanza electrónica para el control de los vehículos.Corrupción campante Parece que el estar alejados a sólo unas horas de la capital hace que las intenciones de las autoridades cambien. El problema de la corrupción se da en varios estamentos del Estado, como las direcciones de educación y los hospitales regionales. Y es que de acuerdo a las denuncias de algunos profesores que están bajo la jurisdicción de las Unidades de Gestión Educativa Local (UGEL) del departamento de Lima, como el caso de la de Huarochirí donde se detectaron que se había sobrevalorado las obras realizadas en tres escuelas, los malos manejos de estas entidades parece ser cosa del día a día.Además, de acuerdo a los reportes de los sistemas anticorrupción la UGEL de Yauyos también padece el mismo mal, y es que los funcionarios pueden hacer casi cualquier tipo de gasto sin tener que justificarlo con recibo, pues sólo se les pide una declaración jurada del mismo para validarlo.“Tenemos zonas pobres como en Huancavelica”LA PRIMERA conversó con el presidente de la región Lima, Nelson Chui, quien señaló que pese a la pobreza que se vive en la región, el desarrollo es posible si se aplican las políticas de inversión necesarias. Existen los proyectos, falta la voluntad para ejecutarlos.–¿Cuál considera que es el principal problema de la región que gobierna?–Creo que es la comunicación. Faltan tanto carreteras como sistemas de telecomunicaciones. El 85% de los terrenos de la región son zonas rurales. Hay zonas en las provincias de Lima que son tan pobres como las de Huancavelica o Ayacucho. Se han detectado 13 distritos que viven en estado de pobreza extrema.–¿Existen proyectos para revertir esta situación?–Estamos trabajando planes de irrigación de zonas donde no hay tierras de cultivo. Básicamente estamos dándole un impulso a la agricultura. Por ejemplo en las pampas de Condón Topará, en el límite de Cañete y Chincha, existe un estudio para irrigar la zona y con esto darle un impulso a la economía de la gente del lugar.–Y en relación al problema con las mineras, ¿cuál es la posición de su gobierno?–Lamentablemente es un problema que se presenta todos los años. Aparecen nuevos problemas y pliegos de reclamos, pero se trabaja en ello para evitar que se agraven. Por ejemplo el caso de Casapalca ya se solucionó.

DETALLE La región Lima está divida en nueve provincias: Cañete, Yauyos, Huaral, Huarochirí, Oyón, Canta, Cajatambo, Barranca y Huara. Lima Metropolitana y el Callao no entran en la jurisdicción política del gobierno regional limeño. Las principales actividades económicas de la región son la minería, la agricultura y el turismo